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Recientemente publicada, la nueva ley sobre portabilidad financiera reduce significativamente los costos de traspasar deudas desde una institución financiera a otra, posibilitando el acceso a mejores condiciones de crédito, y al mismo tiempo, fomentando la competencia en la industria.
Para explicar los alcances de esta nueva ley, “Central en tu vida”, el programa de educación financiera del Banco Central de Chile, publicó un nuevo documento en la sección “Quiero saber más” que busca explicar en qué consiste esta ley, qué consideraciones hay que tener para portarse de una institución financiera a otra y cuáles son los pasos necesarios para hacerlo.
En términos generales, la ley de portabilidad financiera, que entró en vigencia en septiembre del 2020, tiene como finalidad disminuir los costos y tiempos asociados al refinanciamiento de créditos, además de transparentar el proceso de cambio de productos de crédito desde una institución a otra, contemplando la posibilidad de portar no solo créditos, sino que otros productos financieros entre las instituciones que permiten la portabilidad, como lo son bancos, compañías de seguros, agentes administradores de mutuos hipotecarios, cooperativas de ahorro y crédito, cajas de compensación, instituciones que coloquen fondos de manera masiva y emisores de tarjetas.
La nueva ley considera la posibilidad de portar diversos productos financieros como cuentas corrientes, cuentas vista, cuentas de ahorro, créditos rotativos (como líneas de crédito), créditos en cuotas (como créditos de consumo, hipotecarios y comerciales), y tarjetas de crédito.
“Central en tu vida” invitó a leer su documento explicativo de la nueva ley para informarse sobre sus principales alcances y fomentar mejores decisiones financieras.
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